RUTA DEL CID, DÍA 1: BERLANGA DE DUERO – SANTA MARÍA DE HUERTA

NOTA: Comenzar desde Berlanga de Duero es simplemente por continuar el recorrido que dejé  aquí. En el año 2011 recorrí desde Burgos a Berlanga de Duero. Este año, en el mes de septiembre, completé el círculo entre: Berlanga de Duero, Atienza, Jadraque, Siguenza y Medinacelli. Ahora toca intentar llegar a Valencia donde está, en esta ocasión, mi meta)

Me presento: soy un bulldog francés que reside en Burgos, mi nombre es Lucas.

ESTE SOY YO

Hoy comienza realmente la pelea con los pedales. El despertador suena mañanero a las 07:30 y con los nervios propios de un comienzo, me cuesta más completar y montar las alforjas. El desayuno lo hago acompañado, ese momento es un lujo del que me acuerdo el resto de la mañana. Tras las fotos de rigor comienzo a dar mis primeras pedaladas a las nueve de la mañana. El comienzo no es cómodo ya que hace algo de viento que no permite disfrutar de todo lo que voy viendo.

Como decía al comienzo vuelvo sobre mis pasos, los que recorriera este año, el último fin de semana de septiembre, con otro compañero y me llevaron a Medinacelli, kilómetro 0 real de esta aventura. La distancia hasta allí desde Berlanga de Duero son 62 kms. Voy pasando los diferentes pueblos y recordando lo que me pasaba por la cabeza o comentábamos mi compañero de pedales y yo.

Desde Caltojar recorro el desfiladero hasta La Riba de Escalote, esta carretera está señalada como carretera pintoresca en la Guía Michelín. Cuando la recorres entiendes el porqué, ya que es una delicia para los sentidos. Después, Rello, un pueblo protegido por sus antiguas murallas que te trasladan a la edad media. Llegar a Baraona supone poder hacer la primera pausa café en el bar que hay en el cruce que más tarde me llevará hasta Medinacelli. Es el típico lugar que me recuerda al ambiente del que hay en mi pueblo. Me lo tomo con tranquilidad y aprovecho para echar un ojo al único periódico que encuentro en el local, por supuesto de ayer.

DESFILADERO ENTRE CALTOJAR Y LA RIBA

ENTRADA EN RELLO

A «LOMOS» DE HYBRID EN RELLO

TENADA EN LA CAÑADA REAL

MOMENTO DE REPASO Y LECTURA DE PRENSA

Sigo mi itinerario atravesando Yelo. Aquí merece la pena parar unos minutos a contemplar los pajares que tienen, aunque ya con cierto desuso. Desde aquí ya no hay más paradas hasta Medinacelli. Llego a las 12:00 horas de la mañana, el día después de la fiesta del Toro Jubilo (día de fiesta local) y curiosamente me cuesta cuatro preguntas, a otros tantos bares, encontrar ese lugar donde pongan un pincho de tortilla que reponga las fuerzas ya gastadas. El lugar para hacer un almuerzo-café lo encuentro en la plaza donde está la oficina de turismo. Tras este rato voy a la oficina a sellar, doy de nuevo un paseo por el casco viejo y continúo viaje.

PALOMARES DE YELO

ARCO ROMANO DE MEDINACELLI

CALLE DE SAN GIL EN MEDINACELLI

MEDINACELLI

Para llegar a Arcos de Jalón, mi siguiente destino, continúo por la antigua nacional II. Me ha encantado el recorrido. Hasta que he llegado a la estación de Medinaceli, en todo lo que llevo recorrido, me he cruzado con cuatro coches, literalmente. Salvo la zona de la nueva rotonda (en construcción), no he vuelto a ver demasiados.

Como decía el recorrido por la antigua nacional lo he disfrutado un montón. El tiempo ya ha cambiado bastante y me ha permitido ir sin cazadora. El único inconveniente es que he pinchado en unos 800 mtrs. dos veces. La segunda de ellas en Somaén, lugar donde he parado para callejear, disfrutar del sol y ver la carrera de moto GP.

REPARANDO UNO DE LOS PINCHAZOS

ACCESO A SOMAÉN

CALLE DE SOMAÉN

Desde aquí el recorrido no ha tenido mucho más misterio. En Arcos de Jalón no he parado.

AVISO: recomiendo estar al tanto de los dos cruces que hay aquí, en casco urbano, con dirección a Aguilar de Montuenga porque no están señalizados. Ni por balizas de carretera, ni del camino del Cid.

Lo que si he hecho es entrar en Aguilar de Montuenga y visitar la casa donde de adolescente estuve en tres ocasiones acompañando a un amigo. La verdad es que resulta fácil recordar las imágenes de aquella casa estando allí. Uno siempre piensa mientras esboza una sonrisa ¡qué tiempos!. Desde Aguilar continúo por el camino, me guío por el GPS porque no hay marcas de ningún tipo. Sigo hasta llegar a Montuenga de Soria, la imagen que te impacta la protagoniza el castillo que preside el cerro desde donde se domina el pueblo (no he subido). Continuo hacia Santa María de Huerta por camino siguiendo la ruta que grabé ayer en el GPS.

AVISO: Atención en la carretera porque el cruce de entrada a la pista está sin indicar. Está a unos 200 mtrs. de la salida del pueblo que lleva hacia Sta. María de Huerta, el segundo que te encuentras y tiene como pista una señal de stop, queda a la derecha. Después sí hay una baliza del GR 86 soriano, pero recomiendo que si venís por aquí vengáis, supongo que luego lo mejorarán, con GPS.

CARTEL INFORMATIVO EN AGUILAR

ENTRADA A MONTUENGA DE SORIA

MONTUENGA DE SORIA

La bici con el peso que llevo se comporta “rara”, y la conducción nada tiene que ver a lo que estoy acostumbrado. El camino está perfectamente transitable y no ofrece ninguna dificultad.

La llegada a Santa María lo hago por la parte alta del municipio lo que facilita mucho mis últimos metros. La primera parada es de avituallamiento frente al Convento Cisterciense que tiene el mismo nombre que la localidad. Frente a él hay un bar que se llama Remacha y pregunto por algo para comer. Es bastante tarde, las cuatro, y me ofrecen hacerme un bocadillo. Lo pido de tortilla de jamón y es una delicia, recién hecho…. Uf! Qué gozada. Merece la pena la parada.

POSTRE EN EL BAR REMACHA

Para mi primera noche me había planteado una experiencia que me apetecía hacer desde hace algún tiempo, la de dormir en un Monasterio. Pregunto en la recepción y me dicen que efectivamente hay sitio. Había llamado durante dos días en bastantes ocasiones para asegurarme la plaza. Me sellan el salvoconducto y me dan las indicaciones pertinentes del lugar y el uso de la llave. Salgo hacia mi lugar de reposo y antes de que meta la llave en la cerradura uno de los padres me llama.

Al que está en la recepción se le “había olvidado” decirme que la hospedería en cuestión es para transeúntes y vagabundos. Gente sin hogar que va realizando rutas entre lugares de acogida, los siguientes serían Ateca y Calatayud. Me avisa que no se hace responsable de mis pertenencias y me alerta de que se dan muchos casos de robos. Con esos antecedentes le devuelvo la llave y voy a buscar el otro lugar que me marcaba la guía, Habitaciones Sta. María.

AVISO: cuando se visita la web del Monasterio tienen una fórmula de alojamiento que es la de retirada espiritual, en esa no dejan a turistas que sólo vayan de paso.

ENTRADA A SANTA MARÍA DE HUERTA

MAQUETA DEL MONASTERIO

Tengo la fortuna de encontrarme a los dueños de esta pensión que están recién llegados. El precio son 18 €, es una habitación normal con baño fuera.

Aviso: los señores se jubilan en dos meses.

Tras la ducha de rigor regreso al Monasterio para hacer la visita turística, la entrada son 2,50 € y merece la pena. Fue fundado alrededor de 1150 y en él habitaron siempre monjes cistercienses hasta la exclaustración de 1835. Vuelven de nuevo al monasterio en 1930.

Para facilitarte la visita te dan un folleto turístico con información escueta que facilita visitarlo por tu cuenta. En un principio todo es muy idílico: música gregoriana de fondo, un claustro donde estoy solo, lectura relajada sentado en un banco,…. Un lujo vamos!. Lo bueno no suele durar mucho, según dice la ley de Murphy. A los cinco minutos un grupo bastante numeroso, al que se le avisa que están en un sitio de culto donde una de las normas es el silencio, alborota el momentazo entre voces y fotos con flash rompiendo toda la magia. Intento apresurarme en la visita, pero es imposible alejarme de ellos. Me planteo retrasarme e ir más despacio, pero siempre hay alguien que va más lento que yo. El problema es que el monasterio lo cierran a las seis y son las cinco, o sea que tenía que apresurarme.

CILLA (GRANERO) DEL MONASTERIO

CLAUSTRO GÓTICO DEL MONASTERIO

PINTURAS EN EL RETABLO DE LA IGLESIA DEL MONASTERIO

SANTA MARÍA DE HUERTA

Después toca volver a la pensión para plantear la ruta de mañana e ir escribiendo el blog.

Haciéndose la hora de la cena decido volver al bar donde me he comido el bocadillo esta mañana. Esta vez pruebo las raciones y un par de cervezas. Las raciones también son generosas y muy buenas.

El día no da para más, así que toca descansar que mañana es una ruta entretenida.